La minería ilegal que viene a ser la minería no
autorizada, no garantizada, por el Estado, no es sino una más de las
actividades que se dan gracias a la indiferencia, incapacidad, vacío de
autoridad, brindada por quienes juran representar al Estado y simplemente lo
traicionan.
¿PORQUE ADMIRARNOS?
No nos admiremos que esto suceda
en los ríos y cerros más alejados de nuestra capital, cuando en la misma
capital, Lima, tenemos estos vacíos sin participación de a la autoridad.
En el transporte, en el comercio,
en la construcción, en las invasiones de tierras, en la precariedad en que viven nuestros compatriotas en la forma
tan riesgosa en que se transita por la capital; 500 casas se pierden por
incendios ¿y cuantas más?
EN LA CAPITAL DEL PERÚ:
¿Dónde ha sucedido estas
desgracias? en nuestra capital Lima; tenían agua NO, tenían oportunidad de
salvar algo, adquirido en su precaria economía NO; tienen ayuda pronta y
oportuna NO, tienen estas y otras mies de familias alguna atención de prever
alguna desgracia NO, el propio gobierno no garantiza sus depósitos como en el
incendio en el Deposito del Ministerio de Educación, donde se ha perdido
cientos de millones de soles de los cuales somos todos los peruanos dueños que
encargamos al Estado su cuidado, tenían algún plan de previsión NO.
Si todo esto son así como se
menciona, porque prestarse a mencionar estas noticias como si fueran
sorpresivas y sin responsables.
CUCUFATERÍA NACIONAL
Termino que no le gusta a nadie,
pues pareciera que en él se identifican a cientos, miles y millones de seres
humanos que juegan a la gallina ciega, al palo descebado o a la pega y así no
dejan de cobrar de las arcas de todos los peruanos suculentos montos, que
lógicamente les corresponde LEGALMENTE. No solo la gran minería contribuye con
la economía del país, también la pequeña, si cada una de las autoridades
cumpliría con el Perú.
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