CAPITAL HUMANO PARA EL DESARROLLO PRODUCTIVO
OSCAR VIZCARRA HIDROGO
Consultor Empresarial
Es
conocido por todos que el trabajo es fuente de riqueza y dignifica a la
persona, otorgándole un mejor nivel de vida en el mediano y largo plazo, en la
búsqueda de su realización plena.
Y
pese a la globalización de la economía, los grandes capitales financieros y el
reconocimiento de mercados, el potencial humano no ha sido desplazado ya que su
habilidad, conocimiento e imaginación, aplicados eficientemente, son las
puertas del éxito para llegar a la calidad total y la excelencia.
En
efecto, el liderazgo del potencial humano se acentúa cada vez más en la vida de
cualquier organización, siendo el capital principal el que le da vida,
movimiento y acción.
Por
dichas razones, la fuerza laboral formal del país, tanto de la actividad
pública como de la privada, ha tomado con gran optimismo y regocijo las últimas
disposiciones laborales del Ejecutivo, como el decreto supremo que dispone que
los empleados en planilla sigan recibiendo su aguinaldo de julio y diciembre
sin descuentos, desvirtuando a aquellas voces desconfiadas que erróneamente
señalaban que el Gobierno pretendía favorecer a los empresarios.
De
esa manera, ha quedado demostrado el respeto a la fuerza laboral con esta norma
que resta posibilidades de descuentos injustos no previstos en estos pagos
anuales.
El
impacto directo de la medida favorecerá a los trabajadores formales porque
contarán con más dinero para cumplir con sus pagos, además de incrementar su
capacidad de consumo o de inversión en algún tipo de emprendimiento personal o
familiar. Cualquiera de estos resultados contribuirá al círculo virtuoso de la
economía.
Además,
los alcances de este decreto ratifican y reafirman la voluntad del Gobierno por
respetar los derechos laborales logrados por los trabajadores a través del
tiempo, ya que son inalienables e imprescriptibles.
Con
respecto a la propuesta del Ejecutivo de crear el seguro de desempleo, podemos
indicar que será optativo, y cualquier decisión final que se tome respecto a
este tema, será discutida y consensuada en el ámbito del Consejo Nacional del
trabajo, plataforma de diálogo que reúne a los representantes del Estado, el
empresariado y los trabajadores.
En
este caso, el consenso entre los sectores involucrados es vital para que la
norma por emitirse cuente con el aval de la concertación democrática.
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