LOS TOPOS
La Sociedad Peruana
ha sido tomada por los llamados Topos ciudadanos que imitando a estos seres
vienen construyendo sus cuevas, sus túneles de concepción pestilente acción, convirtiendo el país en
una coladera para el mal, vías por donde discurren libremente todo mal
putrefacto corrompiendo nuestras organizaciones políticas, sociales para así
implementar sus acciones corruptas con toda impunidad saltando a la superficie
con franca osadía.
EL PERÚ DE AYER
Tuvo la oportunidad
de ir desarrollándose y organizándo su sociedad regularmente dentro de
parámetros bastante positivos.
No es casualidad que
los topos hayan logrado legalizar sus acciones como actos positivos, tratando
de hacer creer que la corrupción es parte del desarrollo económico, social,
moderno.
LAS POLÍTICAS Y LOS POLÍTICOS
Todos están obligados
a cumplir jugando a ser ciegos y torpes, he ahí la razón por la que se dicen y
contradicen en todas las propuestas para combatir la corrupción en general, protegiendo
así a los malandrines que viven como reyes mientras que los peruanos en mayoría
mueren vilmente asesinados de hambre en la ignorancia y vilmente asesinados en
medio de la indiferencia de quienes obsten el poder.
EL NARCOTRÁFICO
Actividad
extremadamente productiva que amparada en sistemas políticos, sociales, logra
controlar el país consensuando a emular a los topos minando nuestras
sociedades, para finalmente salir fortalecidos ya a la vista de todos, ante una
sociedad atemorizada nada los detiene.
Tomaron los puertos
como si fueran domicilios privados don las autoridades y ciudadanos en general
no pueden entra si no tienen una autorización expresa de un juez, en un país que
es el primer producto de coca como el nuestro como convencieron a los
rematadores de nuestro puerto para concesionarlos en esa condiciones
convirtiendo nuestros puertos en vía libre para el transporte de coca que a
convertido a los puertos y sus calles en zona donde el crimen y asesinatos de
estibadores ya suman veinticinco sin contar ciudadanos que mueren asesinados por
la vil competencia en este negocio de crímenes.
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