Si consideramos el transporte público en el Callao como una necesidad pública que requiere de constantes inversiones y ajustes en sus sistemas, ya que tanto el parque automotor, la ciudad misma y sus habitantes, varían constantemente en su cantidad y ubicación, los vehículos envejecen prontamente, los ciudadanos se incrementan y los centros urbanos crecen tanto en su extensión longitudinal como en su altura.
EXPONIENDO A LOS USUARIOS
La indiferencia intencionada por los servicios de transporte en el Callao (servicios menores, los llaman, pero no por ello son menos necesarios) pondrían en riesgo eminente la vida, la salud de los ciudadanos chalacos (madres de familia, niños en edad escolar, trabajadores y ciudadanos en general) al no registrarlos, no identificarlos e ignorarlos; se calcula que existen aproximadamente entre autos (colectivos) taxicholos (como los llaman), un número superior a los 2000 vehículos, donde se vienen presentando el mismo fenómeno (por así llamarlo) del gremio de Construcción Civil, infiltrados ciudadanos de toda laya y la autoridad competente pareciera abandonar sus responsabilidades y obligaciones, ya que no se atienden los requerimientos de estos servicios, registrándolos, asignándoles lugares convenientes de estacionamiento, si fuera el caso, rutas acorde con las necesidades de servicio de los usuarios, para brindar seguridad y orden a los usuarios, por ser vehículos livianos (salvo que se requiera en la ciudad al servicio de la ciudadanía, sólo tanques de guerra o vehículos blindados) con el criterio que si yo no los miro, no soy responsable, parecería bastante pobre y pusilánime, si fuera así.
NE CONTRA DE LA POLÍTICA DE LIBRE MERCADO
Por otro lado existiendo en nuestro medio una política de libre mercado, deberíamos no establecer políticas de discriminación o interferencia en los servicios del transporte público de pasajeros urbanos, al registrarlos a unos y a otros no y convertirlos a unos en servicios legales y a otros en piratas, dejando de lado “la oferta y la demanda” que es fuente rectora del “libre mercado” o las autoridades políticas y los técnicos del Callao que tienen la alta responsabilidad de administrar el transporte urbano de pasajeros intentan crear y establecer una nueva política social – administrativa clonando cholos y gringos en el transporte.
ACCIONES HERÓICAS DE LOS TÉCNICOS Y AUTORIDADES.
Medidas visibles de la presencia de la autoridad del transporte está plasmada en un sinnúmero de cartelitos en todas las avenidas principales del Callao, por lo que hay que manejar buscándolos, terminado los choferes con la vista cansada y los nervios alterados.
En caso de no verlos, les cuesta 426.00 nuevos soles cada infracción (llámese caza bobos) ya que en una misma avenida en el Callao estos límites de velocidad varían desde los 30, 40, 45, 60 kms. al antojo de sabe Dios a que oscuras meditadas y calculadas intenciones se deban éstas.
Si son buenas o malas, los propietarios de vehículos lo dirán, no podemos dejar de mencionar que esta es una herencia dejada a sus seguidores, del señor Alex Kouri, que hoy son alcaldes o regidores, concejeros, etc. quienes no han podido conjurar este maleficio.
RECLAMO CIUDADANO
- La ciudadanía reclama saber quienes son los operadores de los “caza bobos”,
- Quienes son los recaudadores de estos dineros,
- Cómo se reparten estos grandes o pequeños montos, 1’000,000, 5’000,000= 10, 20, 30, 50, millones al año, o ¿se peca en sus cálculos y montos por falta de información que provoca especulación?.
- En qué se invierte estos montos
- Quiénes los invierten
- Como se reparten
Los actuales representantes políticos parecieran ir a la re, re elección, no se estará confundiendo el primero puerto del Perú con Babilonia?
EXPONIENDO A LOS USUARIOS
La indiferencia intencionada por los servicios de transporte en el Callao (servicios menores, los llaman, pero no por ello son menos necesarios) pondrían en riesgo eminente la vida, la salud de los ciudadanos chalacos (madres de familia, niños en edad escolar, trabajadores y ciudadanos en general) al no registrarlos, no identificarlos e ignorarlos; se calcula que existen aproximadamente entre autos (colectivos) taxicholos (como los llaman), un número superior a los 2000 vehículos, donde se vienen presentando el mismo fenómeno (por así llamarlo) del gremio de Construcción Civil, infiltrados ciudadanos de toda laya y la autoridad competente pareciera abandonar sus responsabilidades y obligaciones, ya que no se atienden los requerimientos de estos servicios, registrándolos, asignándoles lugares convenientes de estacionamiento, si fuera el caso, rutas acorde con las necesidades de servicio de los usuarios, para brindar seguridad y orden a los usuarios, por ser vehículos livianos (salvo que se requiera en la ciudad al servicio de la ciudadanía, sólo tanques de guerra o vehículos blindados) con el criterio que si yo no los miro, no soy responsable, parecería bastante pobre y pusilánime, si fuera así.
NE CONTRA DE LA POLÍTICA DE LIBRE MERCADO
Por otro lado existiendo en nuestro medio una política de libre mercado, deberíamos no establecer políticas de discriminación o interferencia en los servicios del transporte público de pasajeros urbanos, al registrarlos a unos y a otros no y convertirlos a unos en servicios legales y a otros en piratas, dejando de lado “la oferta y la demanda” que es fuente rectora del “libre mercado” o las autoridades políticas y los técnicos del Callao que tienen la alta responsabilidad de administrar el transporte urbano de pasajeros intentan crear y establecer una nueva política social – administrativa clonando cholos y gringos en el transporte.
ACCIONES HERÓICAS DE LOS TÉCNICOS Y AUTORIDADES.
Medidas visibles de la presencia de la autoridad del transporte está plasmada en un sinnúmero de cartelitos en todas las avenidas principales del Callao, por lo que hay que manejar buscándolos, terminado los choferes con la vista cansada y los nervios alterados.
En caso de no verlos, les cuesta 426.00 nuevos soles cada infracción (llámese caza bobos) ya que en una misma avenida en el Callao estos límites de velocidad varían desde los 30, 40, 45, 60 kms. al antojo de sabe Dios a que oscuras meditadas y calculadas intenciones se deban éstas.
Si son buenas o malas, los propietarios de vehículos lo dirán, no podemos dejar de mencionar que esta es una herencia dejada a sus seguidores, del señor Alex Kouri, que hoy son alcaldes o regidores, concejeros, etc. quienes no han podido conjurar este maleficio.
RECLAMO CIUDADANO
- La ciudadanía reclama saber quienes son los operadores de los “caza bobos”,
- Quienes son los recaudadores de estos dineros,
- Cómo se reparten estos grandes o pequeños montos, 1’000,000, 5’000,000= 10, 20, 30, 50, millones al año, o ¿se peca en sus cálculos y montos por falta de información que provoca especulación?.
- En qué se invierte estos montos
- Quiénes los invierten
- Como se reparten
Los actuales representantes políticos parecieran ir a la re, re elección, no se estará confundiendo el primero puerto del Perú con Babilonia?
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